Esta huelga no es sólo de CCOO y UGT, el 29M ha de ser también el día de la generación sin futuro.
Todas las personas que estamos sin curro, las que trabajamos gratis en becas, las que vivimos de contratos temporales que se renuevan cada 3 meses… Las que trabajamos cuidando de la casa sin que se nos reconozca, a las que nos obligan a declararnos autónomos para trabajar más barato…
Todas las personas que sufrimos los recortes en educación, en investigación y en servicios sociales. Las que seguimos sin casa y vemos cómo la posibilidad de independizarnos está cada día más lejos. Las que nunca cobraremos pensión en nuestra vida, aquellas personas a las que dejan la emigración como única salida.
En definitiva, la huelga general del 29 de marzo ha de ser el día de todas las personas que vemos cómo nos roban el futuro día a día.
La reforma laboral del PP es un ataque gravísimo que desmonta los derechos conquistados por generaciones anteriores y extiende la precariedad a toda la sociedad. Esta reforma no es el principio ni el final de las agresiones contra las mayorías sociales: aún tenemos fresca la reforma laboral del P$O€, la reforma de las pensiones y todas las medidas de “austeridad” que han venido después, y que nos imponen, a las mayorías sociales, el empobrecimiento de nuestras condiciones de vida.
Por lo tanto, esta huelga es también contra todas “los planes de ajuste” que sólo llevan a hundir cada vez más las expectativas de nuestra generación. Es una huelga contra las medidas de austeridad que sufrimos los de siempre, los de abajo. Es una huelga contra el bipartidismo del PP$O€ que gobierna respondiendo a los intereses de los de arriba, contra los recortes, contra la deuda que no hemos contraído y contra los mercados especuladores que nos gobiernan.
Somos la pimera generación en décadas que va a vivir peor, con menos derechos sociales, que la anterior, y por ello, tenemos mucho que decir en esta huelga. No se trata solamente de no ir a trabajar, se trata de participar activamente con nuestra única arma, nuestros cuerpos y nuestra inteligencia. ¡Nos vemos en los piquetes!.
Porque seguimos sin casa, sin curro y sin miedo.
Porque el miedo nunca conquistó derechos.
Si nos roban el futuro, bloqueamos la ciudad.
